Si bien la administración Biden ha tenido muchos aspectos positivos en materia de políticas de inmigración, los números continúan siendo inconsistentes en algunos aspectos.
Algunas de las necesidades de la comunidad latina en EEUU comienzan a encontrar respuesta en la administración Biden. Ejemplo de esto son el nuevo seguro para inmigrantes sin papeles o el programa de sponsoreo para refugiados en Estados Unidos. Pero muchas otras quedan aún pendientes.
El empleo: una de las mayores preocupaciones para la comunidad latina
Los latinos califican sistemáticamente al empleo y la economía como una de sus principales preocupaciones. Los indicadores económicos generales de la administración Biden muestran una mejoría al respecto. Un buen ejemplo de esto es que la Oficina de Estadísticas Laborales informó de que la tasa de desempleo entre los latinos es del 4,5%.
Si bien estos números se encuentran ligeramente por sobre la tasa de desempleo general. Esta representa menos de la mitad de la tasa de desempleo latino en el último mes de la administración Trump, demostrando que las políticas de inmigración al respecto son insuficientes.
No obstante, los latinos están iniciando pequeñas empresas a un ritmo que se ha registrado como el más rápido de la última década. La propiedad de vivienda latina se está expandiendo en tiempo récord y la tasa de pobreza de los niños latinos es la que más ha caído de todos los grupos raciales y étnicos.
Todas estas tendencias reflejan políticas de inmigración acertadas de la administración Biden. Pero no puede ignorarse el hecho de que, en algunas cuestiones puntuales como la anteriormente mencionada, se muestran resultados poco satisfactorios.
La salud: un punto fuerte
En cuanto a la atención sanitaria, la administración Biden merece reconocimiento por aumentar la cobertura médica para la comunidad latina. En octubre del 2022, el Departamento de Salud y Servicios Humanos publicó un informe en el que se mostraban los grandes avances en la inscripción en «Obamacare» (un 53% más desde 2020) entre los latinos.
También se han incrementado los esfuerzos de divulgación para el mercado de la Ley de Cuidado de Salud Asequible, ayudando a llevar la tasa de no asegurados del país a un mínimo histórico.
Otro buen ejemplo de la ayuda legal para inmigrantes en materia de salud es el límite de la Ley de Reducción de la Inflación sobre los precios de la insulina. Esto beneficiará bastante a los ancianos latinos, uno de los sectores que más padecen la diabetes.
Estos logros contrastan con los de la administración anterior, que intentó en repetidas ocasiones acabar con la Ley de protección del paciente y atención asequible (ACA) sin ofrecer una alternativa viable.
La inmigración: continúan las inconsistencias
Pero, en materia de inmigración, el historial del presidente ha sido inconsistente.
Como saldo positivo, la administración de Biden ha reunido a cientos de familias migrantes separadas bajo la gestión Trump. Asimismo, ha presentado una nueva norma destinada a oficiar de ayuda legal para inmigrantes del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) a superar los desafíos legales.
En cuanto a los casos de inmigración por asilo político, se ha ampliado el estatus de protección temporal para incluir a países como Haití y Venezuela. El programa ofrece ayuda legal para inmigrantes que ya están aquí, permitiendo que puedan permanecer durante un tiempo limitado debido a las condiciones peligrosas en sus países de origen.
Además, la administración Biden también planea aumentar el número de refugiados que Estados Unidos acepta del hemisferio occidental.
Sin embargo, estas medidas se han visto eclipsadas por la crisis en la frontera sur, donde se le ha tenido que hacer frente a una afluencia continua de inmigrantes.En enero de este año, Biden anunció nuevas políticas de inmigración que abrirán vías legales de entrada a algunos inmigrantes, pero que también cerrarán el proceso de asilo a muchos más.
Este plan implica una ampliación del Título 42, una controvertida norma sanitaria utilizada como mecanismo de control fronterizo, una política de la que Biden se ha declarado detractor.
En este sentido, los demócratas progresistas y los defensores de los inmigrantes tienen sólidos fundamentos para considerar insuficientes las políticas de inmigración de la administración Biden.
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